¿Por qué son tan útiles los andadores para las personas mayores? En este artículo te damos los mejores consejos y recomendaciones así como explicarte los distintos tipos que existen actualmente.
En VALIDA muchas veces trabajamos con personas que desafortunadamente tienen problemas de movilidad, por ello, ofrecemos soluciones salvaescaleras que permiten hacer más fácil su desplazamiento diario.
Muchas de estas personas utilizan andadores como medio de soporte para moverse con seguridad por su hogar o cuando tienen que salir de casa.
Por este motivo, en este artículo queremos explicarte todo sobre andadores para personas mayores y adultos que puedan requerir temporalmente o indefinidamente de este tipo de accesorios de movilidad para caminar de forma segura.
¿Qué es un andador y para qué sirve?
Un andador caminador es un tipo de ayuda técnica que sirve para mejorar la movilidad y la autonomía de las personas. Normalmente los que más lo utilizan son los ancianos adultos con problemas de movilidad. Estos objetos ofrecen estabilidad y sujeción mientras el usuario está caminando.
Este tipo de ayudas ofrecen más estabilidad que las muletas o los bastones gracias a una amplia base que brinda un mejor soporte y firmeza.
También existen andadores pediátricos especiales para los niños más pequeños que puedan tener problemas de movilidad por algún tipo de discapacidad.
Estas ayudas pueden aportar distintos beneficios a su usuario:
- Ayudar con el equilibrio de la persona y evitar posibles caídas
- Ayudar a limitar la carga de peso en la parte inferior del cuerpo
- Brindar apoyo sobre todo en personas mayores que tienen los músculos más débiles
- Reducir el cansancio o el dolor al caminar o al pararse
- Cuando la persona quiere descansar, permite sentarse en el mismo andador
- Proporcionar una mayor confianza a las personas con un control reducido del movimiento de sus piernas
Tipos de andadores para personas mayores
En el mercado existen una amplia variedad de modelos de andadores, cada uno pensado para unas necesidades específicas. Los fisioterapeutas pueden evaluar al paciente para identificar el mejor tipo de andador.
Andadores sin ruedas:
Este andador es útil para ayudar a caminar de forma independiente y segura, proporcionando una gran estabilidad a su usuario. Normalmente estos andadores suelen tener marcos fabricados en aluminio con cuatro patas regulables en altura. En la parte superior del andador se encuentran las empuñaduras para su sujeción.
Para usar este tipo de andador debe levantarse a cada paso, por lo que la persona debe tener un poco de fuerza en los brazos y a veces puede ser un poco difícil de utilizar.
Andadores con ruedas:
El andador con ruedas, también denominados andador rollator, pueden disponer de 2, 3 o 4 ruedas.
La principal ventaja de estos andadores es que son más fáciles de utilizar y de avanzar con él, pues el usuario no debe levantar el andador a cada paso.
Los andadores con 2 ruedas delanteras tienen apoyos fijos en las dos patas traseras. En general, estos andadores se recomiendan más para espacios de interior.
Los andadores de 3 o 4 ruedas direccionales. También tienen un sistema de frenado en las ruedas traseras. Estos andadores requieren de una mayor habilidad para su utilización.
Muchas de estas ayudas disponen de un asiento acolchado y también de un cesto para transportar objetos. Los andadores con asiento son muy útiles para esas personas con movilidad reducida que se cansan rápidamente.
Asimismo, existen andadores fijos y otros que permiten plegarse para un mejor almacenamiento y transporte.
También existen modelos con ruedas más anchas adaptados para terrenos irregulares como montañas, playas o campos.
Características de los andadores, seguridad y peso
Para determinar una altura adecuada del andador, la persona que lo utilizará debe colocarse dentro del marco de la ayuda técnica.
Debe dejar caer sus brazos y situar las empuñaduras del andador para que queden a la altura de sus muñecas. Para ello, deberá variar la altura para adaptarse a las medidas del usuario, regulando la altura de las patas hasta que empuñaduras y muñecas queden bien posicionadas.
Un andador es el más seguro y ayuda más cuando está adaptado a las necesidades concretas del usuario. Por ello, es importante que el andador sea del tamaño adecuado, pues una altura incorrecta puede ser difícil de usar, provocar caídas o dolor al usuario.
Postura al usar el andador
También es importante adoptar una buena postura al usar el andador para evitar daños en la espalda o en los brazos.
Un fisioterapeuta puede ayudarnos a ajustar la altura y el ancho para una adaptación correcta. Las 4 patas del andador deben tener la misma longitud.
El peso del usuario es otro factor a valorar cuando se tiene que escoger un andador. Debemos tener en cuenta que no todos los andadores soportan la misma carga. Por ello, deberemos elegir uno que se adapte al peso de la persona que lo utilizará.
Medidas de los andadores a tener en cuenta para el uso en casa
Evidentemente otro factor a tener en cuenta cuando vayamos a elegir un andador, es el de sus medidas. Si nuestra casa tiene espacios muy reducidos, deberemos decantarnos por un andador más estrecho, mejor si tiene 2 ruedas o sin ruedas y que sea plegable. También es importante que midas el tamaño de las puertas de tu hogar para asegurarte que tu andador puede pasar sin problemas.
Si el espacio de tu hogar es amplio, puedes elegir un andador con mayores dimensiones y con 4 ruedas.
Precios de los andadores y calidad de materiales
En los andadores existe un amplio rango de precios teniendo en cuenta los distintos factores mencionados como materiales, si el andador es de aluminio ligero o materiales más robustos, u otros como el tipo de modelo elegido y sus distintos opcionales.
Por ello, en el mercado podemos encontrar desde modelos más económicos de unos 30€ hasta algunos de más de 200€. En este sentido es importante valorar el uso que vamos a darle antes de tomar cualquier decisión y consultar con nuestro terapeuta para que pueda ayudarnos a elegir correctamente.
Si estás interesado en obtener una de estas ayudas técnicas, te dejamos un artículo relacionado en el que te explicamos cómo puedes solicitar andadores y sillas de ruedas a través de la Seguridad Social.
Cómo utilizar un andador en el hogar
Si vamos a utilizar el andador sobre todo en espacios de interior como en nuestro hogar, podemos disponer de modelos más sencillos y ligeros que ofrecen igualmente una gran estabilidad.
Antes de utilizar el andador en el hogar, debemos asegurarnos que no hay cables sueltos por el suelo, alfombras que no están pegadas al suelo o muebles que puedan entorpecer el paso de la persona que utiliza el andador.
Andadores y sillas salvaescaleras:
Si en nuestra casa tenemos una silla salvaescaleras o una plataforma subeescaleras instalada, es recomendable disponer de dos andadores, uno para el uso en la planta baja y el otro en la planta superior.
Alquilar o comprar un andador para una persona mayor
Existe la posibilidad de alquilar un andador, esto es útil en esas ocasiones en que se está realizando un tratamiento de recuperación y vamos a poder andar con normalidad en un tiempo determinado. Alquilar un andador también puede ser útil si queremos ver cómo se ajusta el andador a nuestras necesidades. Si tenemos previsión de que el andador va a ser para un uso frecuente y duradero, siempre es aconsejable comprar.
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