¿Os gustaría saber pilotar un avión? Este era el sueño de Jessica Cox, una chica que nació sin brazos que logró cumplir su ilusión.
Padecer una discapacidad no le ha supuesto a Jessica una limitación, ni para hacer volar un avión, ser cinturón negro de Taekwondo, conducir un coche con los pies o tocar el piano.
Actualmente está casada con el que era su instructor de Taekwondo, y ha tenido 3 niñas que también han nacido sin las extremidades superiores. Jessica trabaja en una ONG llamada Handicap International, y entre otras tareas, visita países como Etiopía para animar a los niños con discapacidad que estudien para tener mejores oportunidades.
Podéis ver algunos de sus vídeos aquí: