La herencia yacente es un concepto legal que puede generar incertidumbre y confusión en los procesos sucesorios. Cuando un titular de una herencia fallece sin que se haya designado un heredero o administrador, los bienes y activos quedan en un estado de limbo legal. En este artículo, exploraremos en qué consiste la herencia yacente, cómo se maneja esta situación y los pasos necesarios para la correcta gestión de una sucesión en transición.
¿Cómo se gestiona la herencia yacente?
La herencia yacente es un término legal que se refiere a una situación en la que el titular de una herencia ha fallecido (muerte del causante), pero aún no se ha designado a un heredero (o su aceptación de la herencia) o un administrador de la herencia yacente para gestionar los activos y asuntos relacionados con ella. En otras palabras, la herencia está en un estado de transición, esperando que se realicen los trámites legales correspondientes y el heredero tome la decisión de aceptar o renunciar.
La prescripción produce sus efectos jurídicos a favor y en contra de la herencia antes de haber sido aceptada y durante el tiempo concedido para hacer inventario y para deliberar.
Artículo 1934. Código Civil
Durante este período, los bienes y propiedades de la herencia quedan en un estado de limbo legal y no pueden ser distribuidos ni transferidos hasta que se complete el proceso de sucesión y se identifiquen los herederos legales. Mientras tanto, un administrador de la herencia puede ser nombrado para proteger y preservar los activos hasta que se resuelva la situación de la herencia.
Una herencia se puede mantener como yacente durante 30 años, y sucede cuando no existe una regulación específica de la figura sucesoria y se toma como referencia el plazo de prescripción de reclamación de una herencia.

Además, existen obligaciones tributarias que las personas herederas deben tener en cuenta. En algunas ocasiones, está bien contar con la ayuda de abogado especialista en herencias.
Características de la herencia yacente
La herencia yacente tiene varias características distintivas que la diferencian de una herencia regular. Estas características incluyen:
- Ausencia de heredero designado: no se ha designado un heredero o beneficiario específico para recibir los bienes y activos del difunto. Esto puede deberse a la falta de un testamento válido, la no designación de herederos en un testamento o la falta de acuerdo entre los herederos potenciales.
- Estado de transición: La herencia yacente representa un estado de transición entre el fallecimiento del titular y la designación de un heredero o administrador legal. Durante este período, los bienes y activos quedan en un limbo legal y no pueden ser transferidos ni distribuidos.
- Necesidad de designación de un administrador: En ausencia de un heredero designado, es común nombrar a un administrador para gestionar la herencia yacente. Este administrador es responsable de proteger y preservar los bienes y activos hasta que se resuelva la situación y se identifiquen los herederos legales.
- Limitaciones en la administración de los activos: Durante el período de herencia yacente, los activos no pueden ser transferidos, vendidos o distribuidos sin una autorización legal adecuada. Esto se hace para evitar disputas y asegurar una distribución justa de los bienes entre los herederos.
- Posible intervención judicial: En ciertos casos, cuando la herencia yacente es compleja o hay disputas legales entre los posibles herederos, puede ser necesaria la intervención judicial. Un juez puede tomar decisiones sobre la administración de la herencia y resolver las disputas pendientes.

Causas y factores que generan una herencia yacente
Existen diversas causas y factores que pueden dar lugar a una herencia yacente. Estas incluyen:
- Falta de designación de herederos: Una de las principales causas de una herencia yacente es la falta de designación explícita de herederos en un testamento válido. Si el difunto no ha dejado instrucciones claras sobre cómo se deben distribuir sus bienes y activos después de su fallecimiento, puede generar una situación de incertidumbre y retrasar la designación de herederos.
- Disputas legales y litigios: En algunos casos, las disputas legales y los litigios relacionados con la herencia pueden generar una situación de herencia yacente. Estas disputas pueden surgir por diversas razones, como la validez del testamento, la interpretación de sus disposiciones o la identificación de los herederos legales.
- Desconocimiento de herederos: En ocasiones, puede haber dificultades para identificar y localizar a los herederos legales. Esto puede suceder cuando no se tiene conocimiento de la existencia de ciertos parientes o cuando los herederos están dispersos geográficamente. La búsqueda y notificación de los herederos puede llevar tiempo y retrasar la designación de un administrador.
- Conflictos familiares: Los conflictos familiares, como desacuerdos entre los herederos potenciales, pueden generar obstáculos en el proceso de designación de herederos. Estos conflictos pueden dar lugar a disputas legales y prolongar la situación de herencia yacente hasta que se resuelvan los problemas familiares pendientes.
- Trámites legales complejos: En algunos casos, la complejidad de los trámites legales relacionados con la herencia, como la necesidad de realizar inventarios detallados de los bienes y activos, la liquidación de deudas o la gestión de negocios o propiedades, puede generar retrasos en la designación de un administrador y, por lo tanto, en la resolución de la herencia.
Vocabulario jurídico sobre la herencia yacente
Caudal hereditario: se refiere al conjunto de bienes, derechos y obligaciones que forman parte de una herencia. Es el valor total de los activos y pasivos transmitidos a los herederos. Incluye propiedades, cuentas bancarias, deudas y otros elementos. Se distribuye según el testamento o las leyes aplicables.
La capacidad procesal: se refiere a la capacidad legal de una persona para participar en un proceso judicial, ya sea como demandante, demandado, testigo o cualquier otra parte involucrada. Es la aptitud para ejercer derechos y cumplir deberes procesales. Se basa en la capacidad mental y legal de una persona para comprender y participar en el proceso legal de manera efectiva.
Los herederos yacentes son aquellos que están en una situación de incertidumbre o pendiente de designación en una sucesión. Son los potenciales beneficiarios de una herencia en ausencia de un heredero designado. Estos existen hasta que el heredero acepte o decida renunciar a la herencia. Además, cualquier acreedor puede reclamar la deuda de la herencia en caso de que exista.