¿Os imagináis subir a un taxi y compartir viaje con Bob Esponja, Shrek, Los Simpson o Mickey Mouse? Esto es posible gracias a Rafael, un taxista sevillano que ejerce esta profesión desde 1985, y que ha decorado su vehículo para hacer más ameno y entretenido el trayecto a los niños que viajen con él.
La idea de decorar el taxi surgió de su hija de cuatro años, Rafael cuenta que “cuando terminaba mi turno solía pasar a comprar pegatinas para mi hija. Ella las ponían en su habitación y yo le decía que hacían que su cuarto fuera mágico y un día me dijo: ‘Papá, yo quiero que pongas pegatinas y juguetes en el taxi, así también será mágico.’
De esta manera Rafael empezó a decorar su taxi con juguetes y pegatinas hasta cubrir el coche de arriba abajo. Cuando terminó de decorarlo, y viendo que muchos niños viajaban en él pensó que para los chiquillos enfermos podía ser importante ir distraídos de camino al hospital.
Desde entonces, Rafael lleva a cabo una iniciativa solidaria: llevar de manera gratuita a los pequeños enfermos de cáncer y otras enfermedades, al hospital. Mientras están en su taxi se pueden despreocupar por unos momentos y divertirse viendo cada detalle que adorna su coche.
No obstante, su solidaridad va más allá, en los momentos de crisis que estamos viviendo, ofrece transporte gratuito a familias sin recursos con menores, mayores o enfermos a su cargo que necesiten ir al hospital. Rafael apunta que “todos tenemos que poner nuestro granito de arena para ayudar a personas necesitadas. Es cuestión de ser agradecido con la vida.”