El aislamiento es uno de los principales problemas a los que se encuentran muchas personas mayores, ya sea porque carecen de mecanismos de interacción social, o porque ven reducidas sus capacidades físicas o intelectuales. Pero, por suerte, llega Alfred.
Alfred es un Asistente Personal Interactivo para la Vida Independiente y el Envejecimiento Activo, es decir, un mayordomo virtual personalizado, basado en dispositivos y plataformas móviles.
Este asistente es de muy fácil uso. Los usuarios pueden interactuar con él a través de la voz. Por ejemplo, los mayores pueden hacerle preguntas o darle órdenes.
Además, Alfred monitoriza las constantes vitales del usuario gracias a unos sensores que transmiten la información recibida a la persona deseada, ya sea el cuidador o su personal médico.
Para mejorar la integración social de los usuarios, Alfred sugiere un acontecimiento en función de sus gustos e intereses de cada individuo.
También, incluye juegos para mejorar sus capacidades físicas y cognitivas.
De momento, Alfred ha pasado el periodo de prueba en Alemania, Holanda y Francia, con resultados satisfactorios. Las personas que lo han utilizado durante esta fase piloto tenían una edad media de 77,6 años y pertenecían a asociaciones de mayores. Mientras les explicaban el funcionamiento de Alfred, se hizo evidente que existe una brecha digital entre los mayores.
La financiación de este proyecto corre a cargo del Programa marco de la Unión Europea y ha sido desarrollado por un consorcio de 11 socios de cinco países diferentes. Una de las empresas españolas que participan en Alfred, Worldline Iberia, afirma que esta tecnología tardará en llegar a España, porque aquí todavía no han encontrado socios y, además, la herramienta de síntesis de voz no está adaptada al español.
El siguiente paso ahora es continuar con la búsqueda de financiación para que este proyecto sea una realidad lo antes posible.
¡Adelante, a por una tecnología válida y sin barreras!