Cada día está lleno de oportunidades para poder ayudar a los demás. Una buena excusa es la de aprovechar la declaración de la renta para marcar la casilla de Actividades de Interés Social. Al hacerlo, estaremos destinando el 0,7% del IRPF a la realización de programas que llevan a cabo las ONGs. Esto no supone ningún gasto para el contribuyente, sino simplemente, se destinan parte de los impuestos a las actividades sociales.
Los proyectos que se realizan gracias a estas ayudas se concretan en acciones como:
Programa de Ayuda a Domicilio: dirigidos a personas que, por su discapacidad física necesitan ayuda de terceros para realizar las tareas cotidianas de higiene personal, hacer la compra, limpieza del hogar, preparar la comida, comer…etc.
Programa Respiro Familiar: servicio donde se pone a disposición de la persona cuidadora una residencia temporal para personas con gran discapacidad para que puedan descansar
Servicio de Integración Laboral: orientación, asesoraminto, apoyoy para que las personas con diferentes capacidades puedan integrarse a la empresa.
Mantenimiento y equipamiento de centros asistenciales.
¡[email protected] a marcar la X solidaria e inclusiva!