¿Cómo una persona ciega puede “ver” los cuadros y pinturas más emblemáticas?
La solución se le ha ocurrido a Sara Alonso Molina, una alumna de 20 años de la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) que ha creado una particular versión adaptada del Guernica de Picasso hecha con figuras de madera y diferentes texturas como el terciopelo.
Si bien no es la primera vez que se adaptan obras artísticas para personas con discapacidad visual, la principal novedad de la propuesta de Sara es que se aplica la perspectiva. Y es que, gracias al contorno de las figuras, las líneas de distinto grosor y el uso de distintos materiales percibimos qué está delante y qué detrás.
Además, la particular versión del Guernica incluye una descripción textual, disponible en Braille, que las personas ciegas deben leer después de analizar la obra con el sentido del tacto.
Este trabajo forma parte del proyecto de fin de curso de una asignatura sobre discapacidad llamada “Atención a la diversidad e inclusión educativa: implicaciones didácticas”. La autora, que es amante del arte, explica que su apuesta “es el intento de que los discapacitados visuales pudieran ver “lo que todos vemos”.
¡Bravo por Sara!